¿Por qué es tan importante conocer cómo disponer de una habitación geriátrica adaptada a sus necesidades?

En la mayoría de los casos, los ancianos pierden gradualmente sus capacidades y los familiares tienen que adaptar el espacio de acuerdo a sus necesidades. Esto a veces genera dudas sobre el equipo necesario, el soporte técnico, el mobiliario o las ayudas técnicas necesarias.

En el caso de las residencias de mayores, no hay problema ya que suelen disponer de una completa gama de accesorios, equipamiento, camas, etc. Pero, si bien cada caso es completamente único, es posible que se encuentre ante el dilema de adaptar su habitación a las necesidades de las personas mayores, que pueden volverse cada vez más dependientes.

Desde Más Que Ayudas le presentamos a continuación algunos conceptos generales que le pueden ayudar. No obstante, no dude en contactar con nosotros y le asesoraremos personalmente lo mejor que nos sea posible.

Para empezar a adaptar nuestra habitación y convertirla en una habitación geriátrica, podemos decir que la disposición de la habitación de su ser querido dependerá de si es físicamente apto o dependiente.

Pacientes o familiares independientes

La habitación geriátrica de una persona que pueda desplazarse independientemente debe centrarse en evitar caídas, por lo tanto, necesitaremos tener a mano los utensilios que más utilicemos:

• Deberemos quitar cualquier alfombra que haya colocada en la habitación y en el resto de la vivienda para evitar tropiezos y caídas.
• También debemos evitar los suelos resbaladizos, hay que tener cuidado a la hora de limpiar el suelo y elegir siempre productos de secado rápido y no resbaladizos.
• Si nuestro familiar o paciente duerme solo, no es mala idea instalarle un timbre para que pueda llamar sin necesidad de levantarse.
• Un consejo muy útil es contar con ayudas técnicas como las sillas con inodoro, para que no tenga que ir al baño por la noche. Esto evita desplazamientos durante la noche, cuando todo está oscuro, además de evitar que se desorienten.
• Por último, siempre hay que tener en cuenta que haya espacio suficiente entre la cama y la puerta de salida del dormitorio, eliminando obstáculos que puedan estorbar y provocar algún incidente.

Pacientes o Familiares dependientes

La habitación geriátrica de una persona dependiente, deberemos adaptarla a las características, limitaciones y problemas de tu ser querido sin olvidarte de ti mismo, es importante que te sientas cómodo cuidándolo, porque tu cansancio no le beneficiará.

En general, a grandes rasgos veremos cómo queda la habitación, aunque claro, depende del grado de dependencia. A la hora de establecer diferentes apoyos.

• Nivel I. Moderadamente dependiente: Cuando la persona necesita ayuda para la realización de determinadas actividades básicas de la vida diaria, requiriendo asistencia intermitente o limitada para la autonomía personal.
• Nivel II. Dependencia media: Cuando la persona necesita vigilancia y ayuda en algunas actividades básicas de la vida diaria, al menos dos o tres veces al día, pero no requiere el apoyo continuado de un cuidador o tiene una necesidad importante de apoyo a su autonomía personal.
• Nivel III. Dependencia severa: cuando una persona necesita ayuda para realizar actos básicos de la vida diaria y debido a una pérdida total del autocontrol físico, mental, intelectual o sensorial, necesita el apoyo esencial y continuo de un cuidador o familiar.

Estos aspectos son importantes, cuando se trata de ajustar la habitación, ya que se trata de una adaptación muy importante.

Es posible que la habitación ya no sea sólo un espacio en el que se duerme o se pasa la noche, sino también un lugar en el que se está obligado a pasar parte del día, o incluso todo.

Ayudas técnicas que le ayudarán a completar tu habitación

A continuación le recomendamos algunas de las ayudas técnicas más habituales en una habitación geriátrica:

• Asegúrese de que el dormitorio esté bien ventilado y bien iluminado. Si bien siempre es recomendable la luz del sol, ésta debe ser indirecta. También hay que tener en cuenta la colocación de las lámparas y bombillas, ya que es recomendable evitar colocar la luz de frente al paciente para evitar que esté incómodo o incluso pueda cegarle con el tiempo.
• También deberán adquirir una cama articulada, preferiblemente con ruedas y que se pueda levantar, esto hará que sea más fácil de manipular. Ayudándonos a cambiar de posición o cambiar las sábanas de la cama, sin tener que agacharse o hacer grandes esfuerzos que pueden lesionar al cuidador.
• Coloque la cama separada de la pared por ambos lados (sólo la cabecera de la cama se quedará tocando la pared. De esta forma, podrán realizar las tareas de aseo o manipulación en ambos lados de la cama o con la ayuda de otra persona.
• Si la persona tiende a despertarse por la noche con riesgo de caerse, puede comprar una barandilla de cama para incrementar su seguridad.
• No olvide disponer de algunos productos antiescaras, sobre todo para pacientes encamados. Los sobrecolchones pueden ayudar a evitar la aparición de úlceras por presión. Así como las taloneras pueden colocarse en ambos pies, para evitar que los talones rocen constantemente.
• Además, disponemos de cojines posicionadores y algunos productos que ayudan al cuidador a realizar las tareas de manera más fácil y menos perjudiciales para el usuario.

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